Pug

Los perros de raza pug, se han vuelto cada vez más populares tanto en nuestro país como en el mundo. Su particular personalidad y encanto, lo convierten en una mascota ideal para la familia, en especial para los niños.

Es por esto que debes saber que debido a sus particularidades anatómicas, este pequeño presenta una predisposición especial a padecer ciertas enfermedades, afecciones que debes conocer antes de que decidas adoptarlo.

Si te encanta el perro carlino o pug, sigue leyendo y descubrirás si eres su compañero idóneo.

Origen de la raza de perro pug o carlino

Como ocurre con más frecuencia de la que nos gustaría, el origen del pug es bastante controvertido e incierto. Lo que sí se sabe, es que procede de China, pero nadie se aventura a afirmar con certeza cuáles son sus predecesores. Se dice que quizás guarde relación con el pekinés y otros perros semejantes, aunque otros piensan que, por el contrario, podría ser pariente de perros más grandes, como algunos molosoides.

Lo que sí es cierto es que, junto con los pekineses, los pug eran los perros favoritos en los monasterios tibetanos. Se cree que podrían haber sido los comerciantes holandeses los que, en algunos de sus viajes desde China, trajeron los carlinos a Europa, extendiendo su presencia primero por Francia e Inglaterra, y posteriormente por el resto del continente.

Tanto en Europa, como después en Estados Unidos, los perros pug han sido desde el principio adorados por miles de personas y considerados un excelente perro de compañía, además de perros de exposición. Se podría decir que en Europa existe una fascinación generalizada por esta raza.

Características físicas de la raza de perro pug

El pug es un perro de tamaño pequeño y cuerpo regordete pero muy compacto, de fuerte musculatura. Su cabeza es grande, redonda y está cubierta de arrugas. Su hocico es muy chato, casi plano, y sus ojos redondos, grandes y oscuros, de mirada dulce. El carlino tiene las orejas pequeñas y su disposición puede variar; algunos las tienen dobladas hacia atrás, llamadas “orejas en rosa”, y otros tienen “orejas de botón”, que están plegadas hacia delante y apuntan a los ojos.

La cola del pug se presenta enroscada, preferentemente dos veces, sobre el lomo.

El pelo del perro pug es corto, suave y brillante. Se aceptan distintos tonos, como el blanco plateado, negro, leonado y anaranjado. El hocico y otros detalles en la cara son de color negro.

Carácter del perro de raza carlino o pug

El pug tiene el perfecto comportamiento de un perro de compañía, cariñoso, alegre, vivaz, apegado a su familia. Suelen tener una gran tendencia a llamar la atención, pero no son excesivamente traviesos.

Son animales bastante fáciles de socializar y consiguen llevarse bien con todo tipo de personas y animales. Sin embargo, al jugar con niños, ¡cuidado con la intensidad del trato! El juego demasiado intenso puede molestar al carlino o incluso dañarle.


Los perros carlinos son muy buenos y tranquilos, no suelen presentar problemas de comportamiento. Sin embargo, si pasan demasiado tiempo solos, pueden desarrollar ansiedad por separación, y eso a veces ocasiona conductas destructivas o excesivamente nerviosas. Necesitan compañía constante y estimulación física y mental.

Los pug pueden ser la perfecta mascota para todo tipo de personas, ya vivan solas o en familia, con o sin niños algo crecidos. Incluso, son una perfecta opción para personas inexpertas, que buscan su primer compañero canino. No son apropiados, sin embargo, para familias con niños demasiado pequeños que, debido a su corta edad, aún no saben cómo tratar correctamente a un perro.

Cuidados del perro de raza pug

El pug no es un perro que requiera invertir mucho tiempo en cuidados, pero eso no significa que podamos olvidarnos de sus necesidades. Será necesario, por ejemplo, cepillar su manto de pelo una o dos veces por semana, para mantener su pelaje sano y brillante, libre de suciedad y pelos muertos. Ten en cuenta que suelen perder bastante pelo; si quieres evitar que tu casa se llene de pelos, cepilla al pug todo lo que puedas. El baño no debe ser muy frecuente, sólo cuando esté realmente sucio. ¡Cuidado con sus arrugas! Mejor límpialas con un paño húmedo y sécalas a conciencia para evitar la aparición de hongos y otras infecciones cutáneas.

No debemos exigir a los perros de raza pug un ejercicio muy intenso. Paseos moderados un par de veces al día, complementados con juegos adecuados dentro o fuera de casa son suficientes para satisfacer las necesidades físicas de nuestro perro pug. Cuidado también con los choques térmicos, especialmente si vives en una zona de clima muy cálido y húmedo.

Para terminar la sección de cuidados, te comentamos de nuevo la importancia de la compañía para este perro. El pug no es un perro con un carácter compatible con personas que pasan la mayor parte del día fuera de casa. Necesitan atención y cariño constantes, ya que la soledad excesiva los entristece y vuelve algo destructivos. Esto no significa que no puedas salir de casa por tener un pug; una vida normal, de 8 horas en el trabajo, tiempo de ocio los fines de semana, etc, está bien. Pero no recomendamos dejar a un perro pug solo durante un día entero, ni muchísimo menos periodos más prolongados.

Por lo demás, el pug es un perro muy adaptable y puede vivir en todo tipo de viviendas y ambientes.¡También se adaptan a vivir incluso en zonas urbanas muy pobladas!

En cuanto al adiestramiento, al igual que la socialización, es bastante sencillo en el caso de los perros pug. Recomendamos el entrenamiento en tono positivo, orientado a la recompensa. El adiestramiento con clicker da muy buenos resultados. También puedes premiar al pug con golosinas para perros, pero no te excedas, ¡cuidado con su peso! A los perros les encantaría alimentarse a base de premios, ¡pero no puede ser!

Enfermedades que pueden afectar a los Carlino

El pug es, por lo general, un perro bastante saludable, pero sí conviene destacar su principal problema, el hocico corto. Este gracioso rasgo tiene su lado negativo, y puede afectar negativamente a la salud del pug. Algunas patologías relacionadas con esto son problemas respiratorios, paladar elongado, narinas estenóticas, luxación patelar, entropión y enfermedad de Legg-Calve-Perthes.

Por otro lado, ocasionalmente presentan casos de epilepsia y también lesiones oculares, esto último debido a sus saltones ojos.

En último lugar, como ya hemos mencionado anteriormente, ¡cuidado con su alimentación! Tienden a ponerse algo gorditos; y como ya sabemos, si lo dejamos pasar y acaban sufriendo obesidad canina. ¡Esto puede traer consecuencias muy negativas para su salud! No le des demasiadas golosinas, y en cuanto al pienso, dale uno apropiado para su edad y tamaño. Si encuentras uno específico para los perros de raza pug, aún mejor.

Enfermedades respiratorias

Como ya sabes, el Pug tiene el hocico chato y corto, además los hoyos de su nariz son pequeños y tiene un paladar que no le ayuda para nada, provocándole problemas serios con la entrada y la salida del aire y por el ende el oxígeno. Es por esto que cuando se agita hace como unos sonidos raros similares a un ronquido. Ten algunas consideraciones con tu mascota:
– Nunca exigirles demasiado en el aspecto físico, para que no se agiten mucho.
– Hay que mantenerles el peso siempre regulado, ya que cuando son obesos esta condición empeora.
– Debes estar muy atento al calor extremo, es una raza que no puede estar expuesta a altas temperaturas.

Enfermedades en los ojos

Los ojos de los Pug son muy grandes y saltones, lo que los hace predisponentes a tener más roce y contacto con objetos extraños y finalmente provocar lesiones ulcerosas. Esto también incluye lesiones que se provocan por el mismo roce del pelo de sus pliegues.

Una de las enfermedades oftalmológicas más comunes del perro Pug es el prolapso de la glándula de la membrana nictitante, o cherry eye (ya que se ve como un cúmulo rojo en la parte interna del ojo), el cual muchas veces solo se puede corregir mediante cirugía.